Marshall - Chigorin

Ostende 1905


1.d4 f5 2.e4!? El gambito Staunton, la receta contra la defensa holandesa del gran Howard Staunton, indiscutible numero uno mundial entre 1843 y 1851 y (aunque nadie lo diría por este sacrificio) eminente profeta del juego posicional. Su sentido es claro: el blanco entrega un peón en aras de un rápido desarrollo y un eventual ataque en el flanco del rey negro, algo debilitado por 1...f5. 2...fxe4 3.Nc3 Nf6 4.Bg5! El golpe estándar en esta posición, introducido por Staunton en una partida contra Horwitz en 1846. La impulsiva 4.f3?! es coherente, porque tras 4...exf3?! 5.Nxf3 las blancas tienen clara compensación por el peón, pero prematura, porque 4...d5! 5.fxe4 dxe4 6.Bg5 Bf5! proporciona al alfil negro una estupenda ubicación de la que no dispone en la línea principal. 4...c6!? El segundo movimiento más popular en esta variante. El primero es 4...Nc6, y ahora es natural incidir en el centro con 5.d5. Tras 5...Ne5 6.Qd4 Nf7 7.Bxf6 exf6 8.Nxe4 f5 se llega a una posición con oportunidades para ambos bandos. 4...d5?!, por contra, es mala por 5.Bxf6 exf6 6.Qh5+ g6 7.Qxd5 y ahora 7...Qxd5? 8.Nxd5, con doble ataque en c7 y f6, deja al blanco con un peón de más. 5.Bxf6 Una insípida continuación, sin más intención que recuperar el péon aun a costa del par de alfiles. Aquí sí viene a cuento 5.f3! Qa5! (5...d5? 6.fxe4 dxe4 7.Bc4, con el plan N1e2-g3 y O-O, es muy peligroso para las negras) 6.Bxf6 exf6 7.fxe4 Bb4 8.Qd2, como en la partida Tarrasch-Chigorin de una ronda posterior del mismo torneo. El contundente centro blanco compensa la pérdida del par de alfiles. 5...exf6 6.Nxe4 Qb6 Una continuación perfectamente aceptable, aunque no había nada de malo en 6...d5 7.Ng3 Bd6 8.Bd3 O-O (como en la partida madre Staunton-Hurwitz) y las negras disfrutan de un juego muy cómodo. 7.Rb1 Si no lo conociéramos temeríamos que Marshall tiene el día lánguido. La posición se presta a 7.Bd3!? Qxb2 8.Nf3 y hay cierta compensación por el peón de menos. Lo que no se debe hacer es 7.Qe2?, como le jugó un aficionado a Steinitz en La Haya en 1873, con patéticos resultados: 7...Qxb2 8.Nd6+ Kd8 9.Qe8+ Kc7 10.Qxc8+ Kxd6 11.Rd1 (en apariencia el blanco tiene un ataque muy peligroso, pero...) 11...Na6! 12.Qxa8 Kc7 13.Qxa7 Bb4+ (¿Quién dijo ataque?) 14.Ke2 Qxc2+ 15.Kf3 Qf5+ 16.Kg3 Bd6+ y las blancas se rindieron. 7...d5 Por otra parte, Chigorin tampoco era de los de aceptar gambitos: cabía la posibilidad de 7...Qa5+ 8.Nd2 Qxa2 9.Nc4 Qa4 10.Ra1 Qb4+ 11.c3 Qe7+ 12.Be2, con juego incierto. 8.Ng3 Be6 Otra opción es 8...Bd6 9.Bd3 O-O 10.Qh5 f5 y aquí puede pasar de todo (Goldsmith-Fisher, Melbourne 1875) 9.Bd3 Nd7 Pero no 9...Qa5+ 10.c3 Qxa2? 11.N1e2 Bd6 12.O-O O-O 13.Qc2 y la amenaza Ra1 cuesta (para empezar) el peón de h7. 10.Qe2 Kf7 El ataque sobre el alfil obliga al negro a prescindir del enroque, pero el rey no está mal situado (de momento) en f7. 11.Nf3 Re8 Más natural parece 11...g6 12.O-O Bh6 13.Rfe1 Rhe8 y las negras se desarrollan armónicamente. 12.O-O Bd6 13.c3 Mr. Marshall sigue un tanto amodorrado. 13.c4!? le habría echado a la partida un poco más de pimienta. 13...Nf8?! En dirección a g6, para seguir con ...Rhf8 y ...Kg8. La maniobra del ruso está encaminada a evitar el avance ...g7-g6, necesario para que tras ...Rhf8 el peón de h7 no quede indefenso, pero no había nada censurable en 13...g6, y si 14.Qd2 entonces 14...Kg7. 14.Nh4!? Ya se puso el traje de faena el gran timador. Ahí va el anzuelo. 14...Bf5? La obcecación de Chigorin en no jugar 14...g6 va a costarle la partida. Probablemente había calculado que el ataque sobre la dama le permitía cambiar alfiles, en plan 15.Qc2 Bxd3 16.Qxd3 Ne6, pero le espera una desagradable sorpresa. 15.Nhxf5! Pescado. Aunque la víctima, como siempre pasa en estos casos, no lo sabe todavía. 15...Rxe2 16.Nxd6+ Ke6 Tras 16...Kg8 17.Nxe2 el blanco acumularía demasiado material por la dama, ya que el caballo no se puede atrapar: 17...g6 18.c4! (para seguir con c5) 18...c5 19.dxc5 Qxc5 20.Nb5 dxc4 21.Rbc1! y 21...Qxb5 es imposible por el jaque doble 22.Bxc4+. Ahora lo normal sería 17.Bxe2 Kxd6 18.Nf5+ Kc7 19.Nxg7 y la mejor disposición de las piezas blancas compensa el ligero déficit de material, pero Marshall no se ha levantado de la siesta para esto. 17.Nc8! Un jugadón imposible de prever. En realidad la torre de e2 está sentenciada, así que la balanza del material se decantará de uno u otro lado según que las blancas salven o no el caballo. Pero llevarlo a c8 es como intentar escapar de Sauron yéndose a Mordor... La máquina, menos lírica, encuentra 17.c4!, y ahora entenderéis por qué os decía lo de la torre: sí 17...Rd2 18.c5 Qb4 entonces 19.Bf5+ Ke7 20.Rfe1+, aprovechando que la columna e ha quedado despejada, desencadena un ataque de mate, 20...Ne6 (20...Kd8 21.Re8+ Kc7 22.Rc8#) 21.Rxe6+ Kd8 22.Rbe1 y no hay manera sensata de parar ...Re8+. Ojo porque la posición es más resbaladiza de lo que parece: la intuitiva 17.Ndf5? sí permite 17...Rd2 18.Rfe1+ Kd7 19.Re7+ Kd8 20.Rbe1 Ng6 y no hay mate. 17...Qc7 18.Bxe2 Kf7?! Esto facilita las cosas a Marshall, pero no había ninguna manera clara de salir del atolladero. La directa 18...Qxc8 19.Bg4+ es inviable, así que sopesemos las alternativas. Si 18...g6 19.Rfe1 f5, impidiendo que el alfil defienda al caballo, aparece la elegante 20.Bf3+ Kf6 (20...Kf7 21.Re7+) 21.Ne7 Ne6 22.Bxd5! Con 18...Nd7 19.Bh5! (tocando e8 y garantizando el control de la columna) 19...Qxc8 el caballo de hecho cae, pero 20.Rfe1+ Kd6 21.Nf5+ Kc7 22.Nxg7 Kb6 23.Re7 da a las blancas control total sobre el tablero. Si, finalmente, 18...Ng6 (lo más correoso), las blancas han de ser muy dinámicas para llevarse el gato al agua: 19.f4! Kf7 (19...f5 20.Bd3) 20.Bh5 Kf8 21.f5 Nh4 22.Nxa7 Qb8 23.Nxc6 bxc6 24.Bg4 Kf7 25.Nh5 y ahora es el caballo negro el que está en apuros. 19.Nf5! Ya se sabe que la manera de escapar de Sauron es ir a Mordor. 19...Ne6 19...Qxc8 aún no es posible: 20.Nd6+. 20.Nfd6+ Kg6 Chigorin se conforma ya con cambiar la torre por ambos caballos, y ni para ti ni para mí, pero hay otra variable en la ecuación: la inestable posición del rey negro. 21.Bd3+ Kh5 21...Kg5 22.Rbe1 Rxc8 (22...Nf4 23.Re7 es parecido a lo que se vio en la partida) 23.Rxe6 Rd8 24.Nf5 no es una alternativa viable, y no digamos ya 21...Kh6 22.Nf5+ Kg5 23.Nce7 g6 24.h4+ Kf4 25.g3+ Kf3 26.Rfe1. 22.Rbe1 Nf4 23.Re7 Qa5 23...Qb8 mantiene la amenaza sobre la caballería, y no olvidemos que el alfil está tocado: 24.Rxg7 Nxd3 25.Nf5. Lo que estaría muy bien de no ser por la tremebunda amenaza de mate 26.g4#. Y 23...Rxc8 24.Rxc7 Rxc7 25.Bc2 g6 26.Re1 Rd7 27.Ne8 pierde material. Estos caballos son escurridizos como anguilas. 24.Bb1 24.Rxg7!, con la conocida amenaza 24...Nxd3 25.Nf5, era más exacta, así como 24.Bc2, reservándose la posibilidad de un jaque en d1, pero la partida está ganada de todos modos. 24...g6 Quitando la casilla f5 a alfil y caballo, pero cuidado porque ahora la torre toca h7. 25.g3 Nh3+ 26.Kg2 Ng5 27.Bd3 Con la definitiva 28.h4, para seguir con Be2+ y Nf7+ cuando el caballo mueva, en perspectiva. 27...Rxc8 Si 27...Kh6, lo dicho: 28.h4 Ne4 29.Nf7+ 28.Nxc8 Qd8 Chigorín todavía fantasea con capturar el célebre caballo, pero está a punto de darse de morros contra la realidad. 29.h4 Qxc8 Engordar para morir, pero tampoco había esperanza en 29...Ne4 30.Rxh7+ Kg4 31.Ne7. 30.hxg5 Chigorin se rindió. No es solo que el blanco haya acabado con ventaja material, es que es mate: 30...Kxg5 (o 30...fxg5 31.Rxh7+ Kg4 32.f3#) 31.f4+ Kg4 (31...Kh6 32.Rh1+) 32.Be2+ Kf5 33.g4#. El trilero Marshall ha vuelto a darle el cambiazo a un pardillo. 1-0 [Comentarios parcialmente basados en notas de Marshall y Moskalenko]