Problema de M. Caillaud

Messigny 1995


Pinchad aquí, por favor: Y ahora, el reto:

Se ha llegado a esta posición tras la jugada 16 de las negras. ¿Cómo se ha desarrollado la partida?

Antes de que huyáis a la carrera, analicemos la posición y veamos si podemos extraer alguna información, aunque sea básica. Primero las blancas. ¿En qué han podido gastar sus 16 movimientos? a) En las capturas exd3 y gxf3. Eso son 2 movimientos. b) Al menos se necesitan otros 2 (Ng1-e2-c3) para que los caballos aparezcan en su posición actual. c) Y 2 más para que el peón de a2 llegue a a5. d) El alfil de a4 ha debido invertir 3 movimientos por lo menos en su viaje, y si se quiere llegar justo en 3 la única posibilidad es Bf1-h3-d7-a4. Notemos que no es posible "acortar" con Bf1-b5-a4 porque siempre ha habido un peón en e2 o d3. e) La ausencia del alfil negro de f8 es la que lo lía todo porque los peones de e7 y g7 siguen en su sitio, lo que implica que ha debido ser capturado en esa casilla por una pieza blanca. Hay que descartar la torre de a1: una ruta como Ra1-a4-d4-d8-f8-d8-d4-a4-a1 exigiría 8 movimientos y como ya hemos descontado 9 por otras razones nos iríamos a 17, uno de más. El caballo de rey es una opción mejor, Ng1-h3-g5-e6-f8-e6-c5-e4-c3 son también 8 movimientos y nos ahorramos los 2 del apartado b), pero ¿qué pasa con la dama en g2? Ella también necesita un par de jugadas como mínimo para llegar allí, y de nuevo alcanzamos la fatídica cifra de 17. Así pues, está claro que ha sido la dama quien ha capturado el alfil, y para que salgan las cuentas la única ruta posible es Qd1-g4-c8-f8-c8-g4-g2, que son 6 movimientos más. En resumen: 2+2+2+3+6=15. ¡Si hasta nos quedamos cortos por uno! ¿Veis como no es tan difícil?

Comprobemos a continuación cómo le ha cundido el tiempo a las negras. a) Aparte del alfil de f8 solo les faltan dos piezas, el peón de d y la dama. Es obvio que el primero ha sido capturado en e3, y por tanto la segunda en f3. Posiblemente 5 movimientos en total, 3 con el peon y dos con la dama (vía d5). b) El rey ha viajado a f6. Eso hace otros 3. c) La torre está en d8. Eso exige cuando menos 3 más, bien porque la torre ha seguido la ruta h8-h6-d6-d8, o bien porque el caballo de g8 ha movido, la torre ha ido directamente a d8 y el caballo ha recuperado luego la posición inicial. d) El peón de h ha avanzado, luego hay que sumar 1. e) Y por último: el alfil de c8 debe desalojar su casilla para que la dama blanca pase por allí y luego volver a ocuparla, lo que nos obliga a añadir otras 2 jugadas a la lista. La cuenta final es entonces 5+3+3+1+2=14, lo que nos da aún 2 movimientos de margen, pero ¿será suficiente? Téngase en cuenta que si retiramos al alfil de la diagonal para dar vía libre a la dama, por ejemplo con Bc8-f5-e4-f5-c8, los 2 movimientos pasan a ser 4 y nuestro saldo se agota...

1.a3!! Solo con este ultraparadójico movimiento, con el que las blancas dilapidan de buenas a primeras su exigua renta a favor, terminarán cuadrando las cuentas. La clave es que 1.a4 d5 2.a5 d4 deja al primer bando sin nada constructivo que hacer; habría que perder de todas formas un tiempo con algo como 3.Ra2, que en realidad serían dos porque la torre debe retornar a a1. 1...d5 2.a4 d4 3.a5 d3 4.exd3 Hasta aquí, normal. Ahora la estrella de la película aparece en pantalla. 4...Bh3! Claro que sí. En este rinconcito el alfil no interfiere con el paseo de la dama en lo más mínimo, y cuando esta haya acabado su tarea regresará a c8. Así que al final son 2, y no 4, movimientos con el alfil: a ver si aún nos van a sobrar jugadas... 5.Ne2 De momento no tiene sentido movilizar la dama: hay que hacer tiempo mientras el negro descarga la última fila. 5...Kd7 6.Nec3 Ke6 7.Qg4+ Solo ahora que el rey ha salvado la diagonal c8-h3 vale esta jugada. Notemos que si el negro hubiera optado por el plan Bc8-f5-e4-f5-c8 habría dos piezas obturando la diagonal y la dama no podría llegar a c8 con su próximo movimiento. 7...Kf6 8.Qc8 Qd5 Todo marcha viento en popa. ¿Necesita realmente el negro las 2 jugadas que tiene de desahogo? 9.Qxf8 Qf3 10.gxf3 Bc8!! La segunda superjugada del problema, tan paradójica o más que la primera. Parece un contrasentido cerrarle el paso a la señora, pero recordemos que también hay que llevar el alfil a a4, y para ello h3 debe estar disponible. En la terminología problemística, la doble jugada del alfil negro se conoce como un resorte: una pieza se mueve de su posición, genera con ello un efecto y regresa luego a su situación inicial. 11.Bh3 h5 12.Bd7 Nh6 13.Ba4 Bh3! La maniobra se repite. Ha llegado la hora de que la dama vuelva a casa. 14.Qc8 Rd8 15.Qg4 Ng8 Un nuevo resorte a cuenta del caballo, aunque no tan espectacular como el primero. 16.Qg2 Bc8 Y con este tercer resorte el problema concluye. Un extraordinario derroche de precisión e imaginación por parte de Michel Caillaud. [Comentarios parcialmente basados en notas del libro Secrets of spectacular chess de J. Lewitt y D. Friedgood]