Vallejo - Nepomniachtchi

Pamplona 2008


1.e4 c5 2.Nc3 Un poquito de esgrima de aperitivo. Enfrentado a la siciliana, probablemente la defensa más analizada del ajedrez, Vallejo amaga con la no tan explorada y mucho menos aguda variante cerrada. 2...a6 3.Nge2 d6 4.g3 b5?! Nepomniachtchi intenta incomodar a su oponente removiendo las aguas, pero esta expansión tan temprana en el ala de dama tiene sus riesgos. 4...e5!? es interesante, suprimiendo definitivamente el avance d2-d4 y optando por un esquema sólido del tipo ...g7-g6, ...Bg7, ...Ngf7, ...Nc6 y ...O-O. Otra posibilidad es intentar revertir a la Najdorf mediante 4...Nf6, pero el blanco no necesita jugar directamente 5.d4 cxd4 6.Nxd4. Es mejor intercalar 5.Bg2 Nc6 y solo ahora 6.d4 cxd4 7.Nxd4. El matiz es que tras la reacción estándar 7...e5?! el blanco tiene la opción de 8.Nf5!, que no puede refutarse con 8...d5 al haberse añadido las jugadas Bg2 Nc6. En la presente situación hay que conformarse con 7...e6 8.O-O Bd7, transponiendo a una línea de la Scheveningen donde las blancas están muy cómodas. 5.Bg2 Bb7 6.d4 Con las cartas boca arriba Vallejo retorna gustoso a la variante abierta. 6...cxd4 7.Nxd4 e6 Como ya se ha explicado, el defecto de 7...e5 es 8.Nf5! g6 9.Ne3 Nf6 10.Ned5 Nbd7 11.a4, con una nítida ventaja del blanco 8.O-O La apertura se ha saldado con éxito para el español, que tiene un plan claro en perspectiva: Re1, a2-a4 y e4-e5. Las negras, en cambio, padecen serios problemas de desarrollo, como evidencia la variante 8...Nf6 9.Re1 Qc7 (si 9...Nbd7 o 9...Nc6 el avance 10.e5! es muy duro) 10.a4 b4 y ahora 11.Nd5! es si cabe más fuerte que en la partida. 8...b4?! Nepomniachtchi no se arredra y sigue adelante con su temerario plan. Probablemente era mejor resignarse a algo como 8...Nc6 9.Nxc6 Bxc6 10.Qd4 Rb8 11.a3, aunque el blanco tiene las mejores bazas en virtud de la inestable situación del peón de d6. 9.Nd5! Sorpresón. Obsérvese que si en la posición cambiamos ...d7-d6 por ...Nf6 entonces 9.Nd5? fracasa, ya que 9...exd5 10.exd5 puede contestarse con 10...Bc5!, evacuando f8 para el rey. Esto era bien conocido cuando se disputó la partida; supongo que Nepomniachtchi estaba al tanto y descartó "de oficio" la impactante novedad teórica de Paco en su preparación. En una partida entre Slobodjan y Van Wely de la Bundesliga 1999 se había jugado 9.Na4 Nd7 10.a3 a5 11.axb4 axb4 12.Nb5 y las cosas acabaron fatal para las negras, de modo que igual el ruso se reservaba una mejora en esta línea. 9...exd5 El regalo debe aceptarse, porque 9...a5 10.Re1 Nd7 11.a3 bxa3 12.Rxa3 es un gozo para el blanco. 10.exd5 A cambio de la pieza el blanco tiene un peón (más otro, el de b4, en el punto de mira), una ventaja de desarrollo descomunal, la columna e y un poderoso baluarte en d5 para sostener una invasión del caballo por c6. Lo que se dice una ganga. Por lo pronto se amenaza 11.Re1+ Be7 12.Nf5 Kf8 13.Qg4 g6 14.Nxe7 Nxe7 15.Bg5. 10...Bc8 Esto es lo que el ordenador recomienda para hacer frente al problema, pero es difícil que el negro pueda librarse jugando así. En la partida Timman-Van der Wiel, Amberes 2011, el negro optó por 10...Be7 11.Re1 Kf8 12.Bf4 Bc8 13.Qd2 a5 14.a3 y perdió igualmente. La alternativa 10...Ne7 11.Re1 Nd7 12.Bf4 tampoco es nada convincente, y 10...Nf6 11.Re1+ Be7 12.Nf5 es directamente suicida. 11.Re1+ Be7 12.c4! Si el sacrificio de caballo era temático, aquí es donde se nota la mano del maestro. No solo se ataca el peón de b4 tras un posible jaque en a4; la amenaza 13.c5 es horripilante. 12...Kf8 Renunciar al enroque no es plato de gusto, pero esta es una de esas posiciones donde no hay respuesta que no tenga alguna pega. La instintiva 12...bxc3 13.bxc3 abre nuevas vías de penetración al blanco, y tras 13...Nf6 no hay tiempo de enrocar porque el blanco tiene 14.Rb1 con la idea 15.Rxb8 Rxb8 16.Nc6. Si 12...Nf6 13.Qa4+ también se pierde el enroque, ya que la alternativa a 13...Kf8 14.Qxb4 es 13...Bd7 14.Qxb4 O-O 15.Qb7 y de súbito las negras pierden una pieza. 13.a3 Muy bien jugado. Ahora 13.c5? no hubiera sido efectiva en vista de 13...dxc5 14.d6 (o 14.Nb3 Bd6!) 14...Qxd6 15.Bxa8 Qxd4. 13...bxa3 13...a5 14.axb4 es una idiotez. 14.Rxa3 Bg5?! El resbalón definitivo, aunque la partida estaba ya muy difícil. Un ejemplo: 14...Nf6 15.Rae3 Ra7 16.Rb3! (aprovechando que si 16...Ra8 entonces 17.Rxb8! Rxb8 18.Nc6) 16...Bg4 17.f3 Bd7 18.Rxe7! Kxe7 19.Qe1+ Kf8 20.Qb4 Ne8 21.Qxb8 Qxb8 22.Rxb8 y es muy dudoso que las negras sobrevivan. 15.Bxg5 Qxg5 16.Ne6+! Apoteósico. 16...fxe6 La otra opción, 16...Bxe6 17.dxe6 Ra7 18.Qxd6+, es todavía más dantesca. 17.dxe6 d5 Resistía más 17...Ra7, pero la máquina despeja cualquier duda sobre el desenlace: 18.Qxd6+ Qe7 19.Qxb8 Qc7 20.e7+! Nxe7 21.Rf3+ Ke8 22.Qb4 Rf8 23.Qa4+ Bd7 24.Rxe7+! Kxe7 25.Qa3+ Qd6 26.Qe3+ Kd8 27.Rxf8+ Qxf8 28.Qxa7 y el peón c4 decide. 18.Rf3+ Nf6 19.h4 Vallejo no da respiro. La dama debe abandonar a su suerte al peón si no quiere caer ella misma, 19...Qh5 20.Rxf6+ gxf6 21.Qxh5. 19...Qg6 20.Qxd5 Ra7 21.e7+ Jugando a placer. 21.Qd8+ Qe8 22.Rxf6+! gxf6 23.Qxf6+ Kg8 24.e7 era igualmente demoledora. 21...Rxe7 22.Rxe7 Qb1+ La inmediata 22...Kxe7 se pena con 23.Re3+ Kf8 24.Qd8+ Ne8 25.Qe7+ Kg8 26.Bd5+. 23.Kh2 Kxe7 24.Re3+ Be6 25.Qxe6+ Las negras abandonaron ante el inminente mate 25...Kf8 (o 25...Kd8 26.Qe7+ Kc8 27.Bb7#) 26.Qe7+ Kg8 27.Bd5+ Nxd5 28.Qe8#. 1-0