Portisch - Radulov

Budapest 1969


1.c4 f5 Radulov responde a la apertura inglesa con su peón de alfil rey, proponiendo a Portisch entrar en una defensa holandesa con 2.d4. 2.Nf3 Este, no obstante, prefiere no mostrar de momento sus cartas y opta por una jugada más flexible. 2...Nf6 3.g3 e6 4.Bg2 Be7 La alternativa principal es 4...d5, pero al blanco puede aprovecharse de que aún no ha avanzado su peón a d4 y jugar 5.O-O c6 (5...dxc4? es mala porque tras 6.Qa4+ y 7.Qxc4 el negro echaría de menos un peón en f7 para defender al de e6) 6.d3, discutiendo a su oponente la supremacía en e4. 5.O-O O-O 6.d4 Será, pues, una holandesa después de todo. El negro gana espacio de inmediato en el flanco de rey y apuesta por la casilla e4, lo que en muchas variantes puede derivar en un fuerte ataque, con ...Qe8-h5 como una de las ideas más típicas (baste recordar la Glücksberg-Najdorf, una de las primeras partidas que disfrutamos en el blog). Por supuesto existe letra pequeña, porque esto implica asumir bastantes riesgos. 6...c6 Una de las principales decisiones del negro en esta apertura es dónde colocar su peón de d. Con 6...d6, con vistas a un posterior ...e5, se entraría en la holandesa clásica. El problema es que el blanco puede organizar el avance e4 más cómodamente, lo que deja a menudo al negro con una debilidad en e6. 7.Qc2 b6 8.Nbd2 d5 Con este movimiento el negro se decanta por el granítico Stonewall o "muro de piedra", que también apareció en la partida Glücksberg-Najdorf. En comparación con las estructuras derivadas de ...d6, el negro logra un control óptimo de e4, haciendo de penetrar por el centro una tarea casi imposible para el blanco (entenderéis dentro de un rato por qué he escrito "casi" en cursivas). A cambio las casillas negras, en particular e5, quedan seriamente debilitadas y el alfil de c8 lo tendrá todavía más difícil para buscarse la vida. 9.Ne5 Bb7 En los primeros días del Stonewall casi siempre se optaba por la citada maniobra ...Qe8-h5, y ello incluye un buen puñado de partidas del excampeón mundial Mikhail Botvinnik, uno de sus grandes valedores. Sin embargo la experiencia fue demostrando que ante una defensa adecuada el ataque perdía su filo y modernamente se prefiere jugar sobre todo en el centro. Colocar el alfil en b7 va en esta línea, aunque también a veces se recurre a la morosa maniobra ...Bd7-e8-h5. Por su parte, el alfil de rey se sitúa más a menudo en d6 que en e7. 10.Nd3! Un plan típico en esta apertura. El blanco pretende colocar sus caballos en d3 y f3 (de ahí que en la jugada 8 se optara por Nbd2 en lugar de la más natural Nc3), desde donde ejercerán máxima presión sobre la crítica casilla e5. 10...Nbd7 11.b4 La expansión por el ala de dama es otro conocido recurso estratégico del blanco en esta posición. 11.Nf4 Kf7 es más ruido que nueces, porque el negro puede jugar a continuación 12...g5. 11...Re8 Sin embargo, si ahora 11...dxc4? el salto 12.Nf4 encierra mucho más peligro: 12...Kf7 13.Qxc4. 12.a4 Bd6 La captura 12...dxc4? sigue siendo prematura por 13.Qxc4. La jugada 12...a5, intentando poner coto a la avalancha blanca en este flanco, es digna de atención, aunque tras 13.bxa5 Rxa5 14.Nb3 Ra8 15.c5 el blanco puede, si lo desea, conseguir un peón pasado porque 15...b5? 16.axb5 cxb5 17.Bd2 le da una gran ventaja. 13.Nf3 Quizás es más preciso jugar de inmediato 13.c5!, porque ahora las negras disponen de una alternativa interesante. 13...Ne4?! Era posible 13...dxc4 14.Qxc4 c5 15.dxc5 bxc5 16.bxc5 Rc8 17.Be3 Nxc5 18.Nxc5 Bxc5 19.Bxc5 Ne4, recuperando la pieza. El blanco conserva todavía cierta iniciativa, pero al menos ya corre el aire. 14.c5! Volviendo a la senda correcta. 14...bxc5 El negro preferiría no abrir la columna b, porque su oponente está en mejores condiciones para aprovecharla que él, pero la retirada 14...Bc7 permite la molesta 15.b5. 15.bxc5 Bc7 16.Bf4! Una idea posicional de mucho fuste. El defecto crónico del muro de piedra es la debilidad en las casillas negras, y tras el cambio de los alfiles que circulan por ellas se hará aún más ostensible. 16...Bxf4 17.gxf4! Otro movimiento temático. Aunque el blanco dobla peones y desnuda un poco su rey, es mucho más importante reforzar la presión sobre las casillas negras. 17...Qc7 18.Nfe5 La amenaza es 19.Nxd7! Qxd7 20.Ne5 Qc7 21.Bxe4! fxe4 22.f3! exf3 23.Rxf3 y en esta posición el caballo es infinitamente más valioso que el alfil. 18...Nef6 El caballo retorna de su infructuosa excursión a ninguna parte. 18...Ndf6? 19.f3. 19.Rfb1 a5? Un grave error posicional. El blanco quiere jugar su alfil a a6 sin miedo a que el caballo salte a b4, pero este movimiento debilita seriamente la casilla b6. A pesar de los dos tiempos perdidos por el caballo de f6, puede jugarse perfectamente algo como 19...Reb8 y el blanco todavía tiene que dar con un modo de tirar abajo la pared. 20.Nxd7! Explotando de inmediato el fallo anterior. Tras la desaparición de los caballos la casilla b6 queda a merced del blanco. 20...Nxd7 21.Ne5! Nxe5 22.fxe5 Reb8 23.Rb6 Ba6 24.Rab1 Rb7 25.Qd2! Esta sutil maniobra de la dama pone a las negras ante la disyuntiva de ceder la columna o permitir un peligroso peón en b6. La maniobra de doblado estándar 25.R1b3?! Rab8 26.Qb2 Qc8! es un callejón sin salida, porque 27.Rxb7 Rxb7 28.Rxb7 Qxb7 29.Qb6 Qxb6 30.cxb6 Kf7 es tablas salvo que el negro se suicide. 25...Rxb6?! Es comprensible que Radulov rechazara la visualmente espantosa 25...Rba7, porque el blanco acumula tantas ventajas (dominio de la columna, debilidades en a5 y b6 y alfil bueno contra alfil malo) que debería ganar de calle si hay justicia en este mundo. El ordenador, sin embargo, ofrece dura resistencia, aunque parece que hay un resquicio. Un posible plan ganador consiste en bloquear primero el ala de rey para no dar ninguna oportunidad de contrajuego a las negras y luego penetrar por la columna, aprovechando las posibilidades tácticas de la posición. La siguiente línea, en absoluto forzada, ilustra estas ideas: 26.Bf3 Bc4 27.h4 Rd8 28.Kh2 Qd7 29.Bh5 Kh8 30.Kg3 Primera parte del plan cumplida. 30...Qc7 El negro puede en cualquier momento jugar ...g6 y expulsar el alfil, pero ello da oportunidades de ataque por la columna g conectadas con un eventual h4-h5. 31.Qb2 Ba6 32.Rb8 Bc8 No es obligatorio retirar el alfil, pero entonces el blanco cambia torres en d8, lleva su dama a b6, juega e2-e3, traslada el alfil a d1 y el peón de a5 cae. 33.e3 Kg8 34.Be2 Qd7 35.Qb6 Kf7 36.f4 Kg8 Y ahora, bien atado el negro de pies y manos, empiezan los juegos artificiales: 37.Bb5!! cxb5 38.c6 Qe7 39.axb5 Kf7 40.Qxd8!! Qxd8 41.b6 Re7 42.b7 Re8 43.Ra8 Bxb7 44.Rxd8 Rxd8 45.Rxb7+ Kg6 46.Re7 a4 47.c7 Rc8 48.Rxe6+ Kf7 49.Ra6 Rxc7 50.Rxa4 Disipada la considerable humareda, el final está ganado por las blancas. Por ejemplo 50...Rd7 51.h5 h6 52.Ra6 Ke7 53.Kf3 Kf8 54.Ke2 Ke7 55.Kd3 Kf8 56.Kc3 Ke7 57.Kb4 y el peón de d5 está condenado. 26.cxb6 Qb7 27.Qxa5 Bb5 De este modo el negro recupera el peón pero la dama penetra por las casillas centrales con efectos decisivos. La alternativa obvia era 27...Bxe2 pero la simple 28.Qb4 seguida de 29.a5 no admite adecuada réplica. Por su parte, 27...Bd3 se contesta contundentemente: 28.Qxa8+! Qxa8 29.b7 Qb8 30.exd3. 28.Qb4 Rxa4 29.Qd6 Kf7 Parece como si a las blancas se les hubiera ido la posición de las manos. El peón de e6 está bien defendido y el de b6 bajo ataque. Además 30.Qc7+? no sirve por 30...Qxc7 31.bxc7 Ra8. Sin embargo, Portisch tiene preparado un maravilloso recurso combinativo. 30.e4!! Dinamitando el muro de piedra justo donde más sólido se suponía. 30...Qxb6 La captura 30...fxe4 es claramente mala por 31.Bh3 Qe7 32.Qxe7+ Kxe7 33.b7. Con 30...dxe4 hay que llevar más cuidado, pero el blanco gana elegantemente mediante 31.d5! exd5 32.e6+ Ke8 33.Rxb5! cxb5 34.Bf1 Ra1 35.e7 Qxe7 36.Qxe7+ Kxe7 37.b7. Lo más tenaz es 30...Bd3 31.Rc1 Qe7 32.Qxc6 Bxe4 33.Qxa4 Qg5 34.Rc7+ Kg6 35.Kf1 Qxg2+ porque a cambio de la calidad las negras consiguen una momentánea iniciativa, pero no es suficiente para salvarse. Se podría seguir 36.Ke1 Qg1+ 37.Ke2 Qg4+ 38.Kd2 Qf3 39.Kc1 Qxf2 40.Rc3 Qe1+ 41.Kb2 Qb1+ 42.Ka3 h6 43.Qb3 Qa1+ 44.Kb4 Qa6 45.Rc6 y no hay nada que hacer. 31.exf5 Qa7 No vale 31...exf5 32.e6+ Kf6 33.e7+ Kf7 34.e8=Q+ Kxe8 35.Re1+ con mate inmediato. 31...Qb7 resiste un poco más pero 32.Qxe6+ Kf8 33.f6 gxf6 34.exf6 da al blanco una ventaja abrumadora. Por ejemplo 34...Ra8 35.Bxd5! cxd5 36.Rxb5 y el final no está lejos. 32.Qxe6+ Kf8 33.Bxd5! cxd5 34.Rxb5 Rxd4 35.Qc8+ Sigue 36.Rb7+ y cae la dama, así que las negras abandonaron. 1-0 [Comentarios parcialmente basados en notas de Giddins]