1.c4 b6 2.d4 e6 3.Nf3 Nf6 Por inversión de jugadas llegamos a la defensa india de dama. En este blog ya nos hemos tropezado con ella, en concreto en la partida Topalov-Aronian.
4.e3 Dizdarevic se desvía de la variante principal 4.g3, que se dio en la citada partida. En vez de sacar su alfil por g2 las blancas planean desarrollarlo por e3, y tras enrocar y fianchettar el otro alfil, iniciar hostilidades contra el rey enemigo. Su adversario, que de momento controla la casilla e4, procurará contrarrestar esta idea jugando en el centro.
4...Bb7 5.Bd3 d5 El negro sitúa de inmediato un fuerte peón en el centro, reforzando su control sobre e4. Una ligera desventaja de esta jugada es que limita a priori la acción del alfil de b7. Alternativas válidas son 5...Bb4+
y 5...Be7.
La inmediata ocupación de e4 con 5...Ne4 es, no obstante, algo apresurada: 6.O-O f5 7.Nfd2 Be7 8.Nc3 Nxc3 9.bxc3 O-O 10.e4 da toda la iniciativa a las blancas (Simagin-Goldenov, Campeonato de la URSS, Moscú 1952).
6.b3 Bd6 Con esta agresiva salida las negras ponen también sus miras en el ala de rey.
7.O-O O-O 8.Bb2 Nbd7 9.Nbd2 9.Nc3 parece algo más activa. Tras 9...c5 10.cxd5 exd5 11.Rc1 Qe7 12.Qe2 Rad8 13.Rfd1, jugada en la cuarta partida del match de desempate por el Campeonato de la URSS entre Petrosian y Polugaevsky, Moscú 1970, se llegó a una posición de aproximada igualdad (aunque Petrosian terminó imponiéndose).
9...Ne4 En la famosa partida Spassky-Tal, Montreal 1979, el mago de Riga jugó 9...Qe7, anotándose una brillante victoria que le valió el premio de belleza del torneo. Os la muestro porque es corta e incluye motivos tácticos análogos a los de la partida de hoy: 10.Rc1 Rad8 11.Qc2 c5 12.cxd5 exd5 13.dxc5 bxc5 14.Qc3 Rfe8 15.Rfd1 d4?! (un sacrificio especulativo de peón muy al estilo de Tal, probablemente no del todo correcto pero difícil de defender en la práctica) 16.exd4 cxd4 17.Qa5? (los ordenadores demuestran que Spassky tendría que haber aceptado el peón con 17.Nd4!, sin miedo a 17...Bxh2+? 18.Kxh2 Ng4+ 19.Kg3! y las blancas ganan) 17...Ne5 18.Nxe5 Bxe5 19.Nc4? (19.Ba3 o 19.Nf1 resisten más, pero la posición blanca es ya muy difícil) 19...Rd5! (la irrupción de la torre es decisiva) 20.Qd2 Bxh2+! 21.Kxh2 Rh5+ 22.Kg1 Ng4 y las blancas abandonaron ya que el mate es inevitable, por ejemplo 23.Re1 Rh1+! 24.Kxh1 Qh4+.
10.Qc2 f5 11.Rad1? Un pequeño despiste que costará muy caro a Dizdarevic. 11.cxd5 exd5 12.Ne5 era perfectamente razonable, llegándose a una posición equilibrada. Ahora, casi de la nada, Miles desata un huracán sobre el tablero.
11...Nxd2! 12.Nxd2 dxc4! 13.Nxc4? Con las dos jugadas anteriores, Miles ha despejado la gran diagonal, y viendo ese par de estiletes apuntando al enroque la partida Lasker-Bauer le viene a uno enseguida a la cabeza. Segurísimo que Dizdarevic la tenía en mente, y creía que capturando con el caballo se protegía del doble sacrificio, pero Miles lo despertará de su error. Merece la pena revisar las alternativas para ir familiarizándonos con este espectacular recurso combinativo. La primera posibilidad es 13.Qxc4 Bd5! (evitando un futuro jaque en e6) 14.Qc2. Ahora, cargados los dos cañones de la escopeta, se empieza a disparar: 14...Bxh2+! La primera bala. 15.Kxh2 Qh4+ La dama se incorpora con jaque al ataque. 16.Kg1 Bxg2! Y aquí viene el segundo proyectil. Si se acepta el nuevo sacrificio, 17.Kxg2, entonces 17...Qg4+ 18.Kh1 Rf6!; la torre se incorpora por la sexta fila y el mate es imparable. Es este combo "alfil-dama-alfil-torre" el que define la famosa maniobra de Lasker.
Preferible, aunque insuficiente, es hacer caso omiso del alfil en g2 y dar oxígeno al rey (tras 13.Qxc4 Bd5 14.Qc2 Bxh2+ 15.Kxh2 Qh4+ 16.Kg1 Bxg2) moviendo el peón de f2 una o dos casillas. La variante 17.f3 se dio de hecho en la partida así que la veremos en su momento; 17.f4 se responde con 17...Qg3 18.Rf2 Bh3+ 19.Kh1 Qxf2, con ventaja material decisiva.
Si se captura con el peón, 13.bxc4, entonces se juega directamente 13...Bxh2+! 14.Kxh2 Qh4+ 15.Kg1 Bxg2!, que lleva a posiciones análogas a las anteriormente descritas.
La captura con el alfil 13.Bxc4 da algo más juego pero tras un puñado de jugadas óptimas por ambos bandos, 13...Bxh2+! 14.Kxh2 Qh4+ 15.Kg1 Bxg2! 16.Bxe6+ Kh8 17.f3 (18.f4 Qg3 seguido de Be4+) 17...Bh3 (la amenaza es 18.Qg3+ y 19.Qg2#) 18.Ne4 Bxf1 19.Bxd7 Ba6 20.Kg2 (si mueve el caballo la torre se suma al ataque vía f6) 20...fxe4 21.Qxe4 Qxe4 22.fxe4 Be2 23.Rg1 Bf3+ y Bxe4, las negras tienen calidad y peón de más.
En vista de todo lo anterior, lo menos malo es resignarse a perder un peón con 13.Be2 (seguido de 13...cxb3 14.axb3). Aquí, por cierto, el sacrificio doble solo da tablas, 13...Bxh2+ 14.Kxh2 Qh4+ 15.Kg1 Bxg2 16.Kxg2 Qg5+ 17.Kh1 Rf6 18.Nf3 Rh6+ 19.Nh2 Rxh2+ (si 19...Qh4 20.Bh5 y 21.f3) 20.Kxh2 Qh4+ 21.Kg2 Qg5+ 22.Kh3 Qh6+ 23.Kg3 Qg5+.
13...Bxh2+! A estas alturas esto ya no nos sorprende...
14.Kxh2 Qh4+ Esto tampoco...
15.Kg1 Bf3!! ...¡pero esto sí, y mucho! Este formidable golpe, bloqueando el crítico peón de f2, es el que se le escapó al reverendo Owen. La amenaza es de lo más vulgar: 16...Qg4 17.g3 Qh3 y mate.
Puede comprobarse que si 15...Bxg2? el blanco se salva con 16.f3.
16.Nd2 No valen 16.gxf3 Qg5+ 17.Kh2 Rf6 ni
16.Be2 Bxg2! 17.f3 Qg3.
16...Bxg2! Ahora sí es factible el sacrificio, porque el caballo se interpone en el camino de la dama blanca. Nótese que hemos llegado a una de las posiciones que consideramos tras la jugada 13 del blanco.
17.f3 Rf6 17...Qg3? 18.Ne4!
18.Nc4 Tampoco sirve 18.Ne4 fxe4 19.Bxe4 Qh1+ 20.Kf2 Bxf3! 21.Rxh1 Bxe4+ y cae la dama.
18...Bh3! Tras esta precisa jugada, con la intención de 19...Rg6+ 20.Kh1 Bg2+ 21.Kg1 Bxf3+, las blancas se rindieron.
Si 19.Rf2 Rg6+ 20.Rg2 Bxg2 la amenaza 21...Bf1+ 22.Kxf1 Qh1+ 23.Kf2 Rg2# fuerza al blanco a entregar su dama.
0-1