1.c4 En su carrera Fischer se había desviado muy pocas veces de su favorita
1.e4,
y nunca contra Spassky.
1...e6 Una jugada bastante conservadora. Más ambiciosas, pero también más arriesgadas son
1...e5,
1...Nf6,
1...c5
y
1...g6.
2.Nf3 Igualmente conservadora.
2...d5 Invitando a Fischer a entrar en el gambito de dama, que nunca había jugado con blancas...
3.d4 ...¡hasta ahora!
3...Nf6 4.Nc3 Be7 5.Bg5 O-O 6.e3 h6 7.Bh4 b6 Se llega así a la variante Tartakower, favorita de Spassky. Es una línea muy sólida que se ha jugado en infinidad de ocasiones en partidas del más alto nivel.
8.cxd5 Nxd5 8...exd5
es perfectamente jugable, pero Spassky prefiere cambiar un par de piezas menores para simplificar la posición: tras su derrota con blancas en la partida anterior, las tablas eran un resultado más que aceptable.
9.Bxe7 Qxe7 10.Nxd5 exd5 11.Rc1 La torre se ubica en la fila semiabierta presionando al peón retrasado en c7 de las negras. Estas deberán procurar cuanto antes la ruptura temática c5 para liberar su posición, actualmente un tanto congestionada.
11...Be6 12.Qa4 c5 De acuerdo con el plan.
13.Qa3 Clavando y amenazando el peon de c5.
13...Rc8 14.Bb5!? Este movimiento, jugado por vez primera en la partida Furman-Geller (Moscú 1970), pretende estorbar el desarrollo del caballo, incrementando indirectamente la presión sobre el peón de c5.
14...a6 Aunque no es un error, esta jugada no es la mejor. El peón de a6 no amenaza en realidad al alfil pues está clavado por la dama blanca. Más aún, queda en una casilla más expuesta donde puede ser débil en el futuro. La mejor jugada aquí era el sacrificio de peón
14...Qb7! Tras 15.dxc5 bxc5 16.Rxc5 Rxc5 17.Qxc5 Na6! las negras obtienen una partida muy activa y, como demostraron análisis posteriores, tras un juego correcto por ambas partes se llega a una posición de claras tablas. Lo curioso es que Geller, uno de los segundos de Spassky en el match, ya conocía el sacrificio y lo había repasado con Spassky meses antes del choque, pero este, por lo visto, lo olvidó.
15.dxc5 bxc5 Creándose "peones colgantes" en c5 y d5. Pueden dar buenas oportunidades de ataque mientras se mantengan móviles y protegidos por piezas; en caso contrario resultan una debilidad.
16.O-O Ra7 17.Be2 Una vez logrado el objetivo de desordenar el ala de dama del adversario, el alfil se retira.
17...Nd7 Spassky se desvía aquí de la partida Furman-Geller antes mencionada, que continuó con
17...a5
y también acabó con derrota de las negras.
18.Nd4! Explotando el hecho de que el último movimiento de las negras clava de nuevo su peón c.
18...Qf8?! Un movimiento bastante extraño. La natural
18...Nf6
era mejor, manteniendo el equilibrio.
19.Nxe6! fxe6 20.e4! De este modo el alfil se vuelve tremendamente poderoso.
20...d4? El error decisivo. Si
20...dxe4 21.Rc4
y cuatro de los seis peones negros quedan débiles y condenados.
20...c4
era la única manera de mantenerse en la partida. Ahora el alfil se hará dueño de la diagonal a2-g8 en tanto que el peón pasado de d4 no tiene expectativas reales de progresar. El negro está estratégicamente perdido.
21.f4 Asegurando el control de la casilla e5.
21...Qe7 Esto confirma que 18...Qf8 no fue lo mejor.
22.e5! Fijando el peón de e6 a una casilla en la que estará sometido a severa presión.
22...Rb8?! El último momento crítico.
22...Nb6 era mejor, pero tras 23.Qd3!,
amenazando 24.Qe4 y 25.Bd3, el blanco debería ganar.
23.Bc4 Amenazando f4-f5.
23...Kh8 Si
23...Nb6 24.Qb3
amenaza capturar el peón de e6 con jaque y clava el caballo.
24.Qh3! Nf8 Si
24...Rxb2 25.Bxe6
y el negro está todavía peor. Ahora le espera una lenta agonía.
25.b3 a5 26.f5 Esta ruptura, como toda la partida de Fischer, está cronometrada a la perfección. No solo crea un peligroso peón pasado, sino que permite a las piezas pesadas blancas acosar al rey negro.
26...exf5 27.Rxf5 Nh7 28.Rcf1 La última pieza blanca se incorpora al ataque.
28.Rf7?? no es posible debido a 28...Ng5.
28...Qd8 29.Qg3 Re7 30.h4 Quita al caballo su única casilla activa.
30...Rbb7 No hay nada que hacer salvo esperar.
31.e6 Atacando el peon c... una vez más.
31...Rbc7 Si
31...d3 32.Rd5
es demoledora.
32.Qe5 Esta centralización es decisiva.
32...Qe8 Si
32...d3 33.Rd1
gana.
33.a4 El negro cada vez tiene menos oxígeno.
33...Qd8 34.R1f2 Qe8 35.R2f3 Los dos últimos movimientos del blanco tienen como objeto ahorrar tiempo —el control se realizaba en la jugada 40— y subrayan la absoluta indefensión de las negras.
35...Qd8 36.Bd3 Qe8 37.Qe4 Amenazando Rf8+ con mate a la siguiente.
37...Nf6 38.Rxf6! Este elegante sacrificio de calidad remata la partida.
38...gxf6 39.Rxf6 Kg8 40.Bc4 Amenazando Rf7.
40...Kh8 Si
40...Qh5 41.Rg6+ Kh8 42.Qa8+
y mate enseguida.
41.Qf4 El único modo de evitar Rf8+ es
41...Kg8, pero tras 42.Rxh6 no hay defensa contra 43.Qf6. Por tanto las negras abandonaron.
1-0
[Comentarios extraídos en su mayor parte de www.chess.com]