Estudio de T. Gorgiev

Shakhmaty v SSSR 1967


No importa mucho cómo ambos bandos se las han ingeniado para llegar a este demencial enredo; la cosa está en quién consigue salir antes de él. Evidentemente el negro, que conserva casi íntegra su armada, es el favorito en las apuestas, porque aunque la esquina inferior izquierda del tablero parece el metro en hora punta, el vagón puede ventilarse de diversos modos, por ejemplo con la obvia d1=Q. El blanco, por su parte, se ha quedado en los huesos y cifra sus esperanzas en su imparable peón en séptima. Y él será, en efecto, el salvador, aunque no de la manera que cabría esperar:

1.Nd4! La histérica 1.e8=Q? se desactiva trivialmente con 1...d1=Q, seguida de 2...Bd2+ y al rey blanco le cae encima una avalancha de piezas negras. Tampoco vale 1.Ne5?, intentando dar mate en c4, porque el negro se defiende con 1...d5. 1...Qa1 No es la jugada más activa de la historia del ajedrez, pero el rey estaba a punto de morir asfixiado: 1...d1=Q? 2.Nb5#. 2.Nb5+ Kb2 3.Nd6! La amenaza es ahora 4.Nc4#. 3...Rd1 4.Nc4+ Si 4.e8=Q? Nc1 el rey encuentra refugio en a2: 5.Nc4+ Ka2 6.Qxd7 Ra3. 4...Kc1 Casi sin querer, las blancas has forzado un impasse: 5.Ne5 (con la idea Nd3#) 5...Kb2 6.Nc4+ Kc1 y tablas por repetición. La pregunta es: ¿hay más? No lo parece, porque 5.e8=Q? sigue fallando, aunque el negro tiene que ser preciso. La continuación ganadora es 5...d5! 6.Ne5 Kb2 7.Nd3+ Ka3 8.Nc5 c1=N! (también vale 8...Nc1, pero no 8...c1=Q? 9.Qxa4+ Kb2 10.Qxb3#) 9.Qxa4+ Kb2 y b3 queda defendido por el caballo. 5.e8=N! La subpromoción es el camino hacia el éxito. Los dos caballos no se pueden parar a la vez. 5...d5 No hay tiempo de dar salida a la torre con 5...b2, ya que 6.Ne5 (¡aprovechando el emparedamiento del rey!) 6...b3 7.Nd3+ es mate. 6.Ned6! Notable. El blanco no se deja impresionar por la amenaza y amarra la pinza de c4. 6.Ne5? Kb2 7.Nd3+ Ka3 8.Nd6 b2 pierde. 6...dxc4 Hay que morir matando, pues si no el caballo de d6 da la estocada en d3 sin mayores problemas, por ejemplo 6...d4 7.Ne4 d3 8.Nc5 seguido de 9.Nxd3#. 7.Nxc4 Zugzwang. Si fuera el turno de mover del blanco, al rey le quedaría el margen justo para desplazarse por la diagonal c1-a3. Ahora una de sus piezas se ve obligada a robarle la última bocanada de aire. 7...Ra3 7...Qb2 (o 7...b2) 8.Ne5 y 9.Nd3#. 8.Ne5 Kb2 9.Nd3# 1-0